He ido a ver La isla desierta, una obra interpretada por el grupo Ojcuro, conjunto de actores entre los cuales hay algunos no videntes. Y este detalle no sería de importancia si no fuera por la característica particular del espectáculo: es en ausencia total de luz.
Con esta propuesta, estimulan nuestros sentidos desde otros puntos, que no son el visual, para transportarnos al mundo de la obra que interpretan. Y la sensación es indescriptible.
Al entrar a la sala, nos acompaña alguno de los actores, que nos lleva hasta nuestra ubicación. Pero este acomodador, lo que hace es orientarnos, ya que pasada una primera, segunda... tercer cortina, pasamos al mundo de la oscuridad absoluta. Y realmente no se ve nada.
Las primeras sensaciones son extrañas, incluso parecería que nos maeramos o descomponemos. No puedo entender por qué, pero no fuí el único, por los comentarios del auditorio. Pero muy pronto la misma se extingue, y comenzamos a disfrutar del hecho de no ver.
Incluso puede que agradezcamos no estar viendo... agradezcamos el despertar de los otros sentidos, por la metodología, y el despertar... de una parte de nosotros, por el argumento.
He disfrutado mucho de la obra, tanto por la novedosa sensación, como por la trama en sí. Quien disfruta del buen teatro, creo que debe darle una oportunidad al teatro ciego. Quien quiere una nueva experiencia, también debería hacerlo. Les aseguro que no van a ver el mundo de la misma manera luego de salir de la obra.
Ficha técnica
Autor: Roberto Arlt
Director: José Menchaca
Lugar: Ciudad Cultural Konex - Sarmiento 3131 (Balvanera, Capital Federal). Teléfono 4864-3200.
Días y Horarios: Viernes y Sábados a las 21:00 hs y 23:00 hs.
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